La ergometría, también llamada prueba de esfuerzo, es la prueba diagnóstica que consiste en realizar un registro del electrocardiograma durante un esfuerzo controlado.
Se utiliza para medir el efecto del ejercicio sobre el corazón, valorar la respuesta del corazón ante el ejercicio. Además de ayudar al diagnóstico correcto
La prueba de esfuerzo o La ergometría también es útil porque nos ayuda en el diagnóstico de la obstrucción coronaria.
Además es útil para valorar el pronóstico en aquellos pacientes con enfermedad coronaria ya conocida al igual que valorar el efecto del tratamiento.
Puede usarse también para determinar cuál es el nivel de esfuerzo físico apropiado para cada persona.
Forma en que se realiza el examen
- Este examen se hace en una clínica, hospital o en el consultorio de un médico.
- El técnico colocará diez parches planos y adhesivos llamados electrodos en su pecho. Estos parches se conectan a un monitor de ECG que sigue la actividad eléctrica del corazón durante el examen.
- La persona caminará en una banda caminadora o pedaleará sobre una bicicleta estática. Poco a poco (aproximadamente cada 3 minutos) le pedirán que camine (o pedalee) más rápido y con un ángulo inclinado o con mayor resistencia. Es como caminar rápido o trotar cuesta arriba.
- Mientras la persona hace ejercicio, se mide la actividad del corazón con un electrocardiograma (ECG). También se toman lecturas de la presión arterial.
El examen continúa hasta que:
- Usted alcance la frecuencia cardíaca deseada.
- Usted presente dolor torácico o un cambio en la presión arterial que sea preocupante.
- Los cambios en el ECG muestren que el músculo de su corazón no está recibiendo suficiente oxígeno.
- Usted esté demasiado cansado o tenga otros síntomas, como dolor en una pierna, que le impidan continuar.
- Se le monitoreará durante 10 a 15 minutos después del ejercicio o hasta que su frecuencia cardíaca retorne a sus niveles iniciales. El tiempo total del examen es de aproximadamente 60 minutos.