Es una enfermedad vírica infecciosa de gravedad variable.
Los síntomas que pueden aparecer son: fiebre, dolor muscular, dolor de cabeza, escalofríos, falta de apetito, nauseas y/o vómitos, dolor abdominal, hemorragias internas, insuficiencia hepática y renal. Puede ocasionar la muerte.
Se adquiere por la picadura de un mosquito infectado, durante las horas del día.
La mejor manera de prevenir esta enfermedad es mediante la vacunación y evitando las picaduras de mosquitos (permanecer en lugares protegidos por mosquiteros o con aire acondicionado, usar ropa que cubra casi todo el cuerpo, usar un repelente de insectos).
En algunas zonas de África y de América del Sur es obligatorio vacunarse para poder entrar en el país.
La vacuna solo se administra en los Centros de Vacunación Internacional autorizados y aprobados por la Organización Mundial de la Salud, en donde se proporciona el Certificado de Vacunación Internacional necesario para poder acceder a los países donde la vacuna es obligatoria.
Hay que vacunarse al menos 10 días antes de inicio del viaje. La vacuna consta de una sola dosis y tiene una validez de 10 años.
Al ser una vacuna de virus atenuado vivo, puede provocar efectos secundarios como fiebre, dolor, malestar, enrojecimiento del lugar de punción. Y está contraindicada en personas con alteraciones inmunitarias, niños menores de 6 años y mujeres durante el primer trimestre de embarazo.