
Si una persona tiene síntomas de una afección cardíaca, su médico puede remitirlos a un cardiólogo.
Los síntomas que pueden indicar un problema cardíaco incluyen:
- falta de aliento
- mareo
- dolores en el pecho
- cambios en la frecuencia o el ritmo cardíaco
- alta presion sanguinea
Un cardiólogo puede realizar pruebas para detectar un soplo cardíaco o un ritmo cardíaco anormal.
A menudo tratan a pacientes que han tenido un ataque cardíaco, insuficiencia cardíaca u otros problemas cardíacos.
Ayudan a tomar decisiones sobre cirugía cardíaca, cateterismo cardíaco y angioplastia y colocación de stent.
El cardiólogo puede dar consejos sobre cómo prevenir la enfermedad cardíaca.
Una persona puede necesitar ver a un cardiólogo incluso sin síntomas, si tiene antecedentes familiares de enfermedad cardíaca o colesterol alto, si es o ha sido fumador, si tiene diabetes o si está comenzando un nuevo programa de ejercicio.
Una mujer que ha tenido preeclampsia puede tener un mayor riesgo de problemas cardíacos en un embarazo posterior o durante la menopausia.